La imagen que pongo en esta entrada es la de la estación de cercanías de Santa Eugenia, en Madrid. Fue una de las estaciones, junto con ...
La imagen que pongo en esta entrada es la de la estación de cercanías de Santa Eugenia, en Madrid. Fue una de las estaciones, junto con El Pozo del tío Raimundo y Atocha RENFE, donde estallaron las bombas el 11 de marzo de 2004. Ese día había huelga en la Universidad Complutense de Madrid, en mi facultad en concreto, con lo que me quedé en casa. La ruta a Moncloa en cercanías la solía tomar, pero no de manera habitual, pues prefería ir en metro. Pero en la cama sí escuché la explosión, la enorme explosión, que en Santa Eugenia se produjo. No sabía lo que era. A los pocos minutos, se supo que habían estallado tres bombas en tres trenes en Madrid, asesinando a 192 personas e hiriendo a 2500 más. En este barrio de Madrid viven muchos amigos míos.
Desde la Guerra Civil española no se había sufrido una masacre de tantas proporciones en España. Sus consecuencias políticas inmediatas fueron claras: el toque final que desprestigió al gobierno de José María Aznar y la asunción de la socialdemocracia de Zapatero durante siete años, en el probablemente peor periodo político de España en la democracia de 1978 (a expensas de valorar el de Rajoy cuando termine). La jornada del 13M, de "acoso" a la sede del PP aquella noche fue uno de los primeros actos, luego reproducidos en el 15M, 7J y demás, donde muchos ciudadanos comenzamos a ser manipulados por la "izquierda" frente a la "derecha", saliendo a la calle solo, realmente, para ir contra el PP. Eso ha sufrido una estocada mortal con las últimas elecciones generales y la victoria aplastante de Mariano Rajoy, aunque algo queda. Los hijos de la socialdemocracia vivirán siempre con inercia de lo realizado por sus padres, aquellos que tanto "lucharon" por el Estado de bienestar, y que tanto "hicieron" porque las Cortes Franquistas votaran el irse a su casa tras ganar la Guerra Civil. Yo estuve frente a la sede del PP aquel 13 de marzo de 2004. No tengo empacho en decirlo, pues no me arrepiento de haber estado. Los pasos y acciones que uno toma en vida deben servir para nuestra continua ubicación en el Mundo, para la ampliación dialéctica de nuestro mundo-entorno. Tampoco me arrepiento de los caminos por los que he transitado hasta hoy. Unos son consecuencia de otros, y los futuros serán consecuencia de los presentes y pretéritos.
Lo que está claro es que la verdad sobre aquello no se pudo realmente dilucidar en un juicio. Y de la misma manera que existen teorías alternativas sobre el 11S, las hay sobre el 11M. Las principales dudas que suscitan estas teorías son las siguientes:
a) La policía científica no elaboró ningún informe que precisara la naturaleza y origen de los explosivos utilizados en los atentados del 11M. Fue en un cutre laboratorio de los TEDAX (equipo de desactivación de explosivos de la Policía Nacional) donde se realizó el examen de los restos de explosivos, saltándose así todo el protocolo normal en estas situaciones. El encontrar nitroglicerina en los componentes químicos hayados tras los atentados, compuesto habitual en la dinamita, aleja la posibilidad de que el explosivo utilizado fuse Goma 2-ECO, que fue el tipo de explosivo que robaron, supuestamente, diversos contrabandistas asturianos de explosivos en la minas de Minaconchita. Estos contrabandistas fueron detenidos y juzgados, junto con varios delincuentes de baja ralea de origen magrebí, durante el juicio instruido por D. Javier Gómez Bermudez. Supuestamente, estos contrabandistas vendieron a los magrebíes el explosivo para realizar los atentados del 11M. Pero en los explosivos detonados en los trenes no había Goma 2-ECO, que fue el explosivo vendido a los supuestos "islamistas".
b) Meses antes fueron detenidos varios etarras en Madrid con varias furgonetas llenas de explosivos que pensaban detonar en un gran atentado que fue frustrado. Años antes intentaron varios miembros de ETA explosionar bombas mediante control remoto por teléfonos móviles durante el funeral del concejal asesinado por ETA José Iruretagoyena. Los hindúes que regentaban la tienda donde se compraron los móviles que permitieron la explosión controlada de los trenes dijeron que se lo compraron españoles que entre sí hablaban en una "lengua extraña", supuestamente el vascuence o eusquérico. Supuestamente, algunos de los "islamistas" implicados en el 11M, como "El Chino" fueron narcotraficantes en el País Vasco, conociendo así a varios etarras. ETA siempre ha controlado el tráfico de drogas en el País Vasco, siendo ellos el filtro de ese mismo tráfico. En una entrevista el 13 de marzo de 2004 en la televisión cubana, Fidel Castro acusó a Aznar de falsamente acusar a ETA de la autoría de los atentados para tapar sus vergüenzas sobre la segunda guerra de Irak, mintiendo a los españoles. Es sabido desde hace años la protección y amparo que en Cuba han tenido los etarras frente a España.
c) Los terroristas islamistas murieron mediante una explosión en un piso de Leganés, Madrid, varios días después del atentado. También murió en esa explosión un miembro de la policía. Normalmente, los islamistas se inmolan a sí mismos en los atentados que cometen. En los trenes del 11M no se encontró el cuerpo sin vida de ningún "islamista".
d) El diario El Mundo acusó a varios mandos policiales que consiguieron su cargo gracias a anteriores gobiernos del PSOE, y contra el PP, controlaron desde el primer momento todos los movimientos de los terroristas y de los contrabandistas, sin intervenir en absoluto en su detención, esperando, con ello, supuestamente, permitir la masacre para hacer daño al gobierno de Aznar. Incluso se denunció que fue la policía la que montó una prueba falsa, una furgoneta Renault Kangoo en Madrid con propaganda islamista, que diversos medios contrarios a la versión oficial dijeron ser una cortina de humo de lo que realmente ocurrió. También se incluirían, supuestamente, otras prueba falsas, como una mochila hallada en Vallecas (El Pozo) llena de metralla, que no se halló en la autopsia de varios cadáveres de los atentados, y que no fue detectada ni por los perros policía, ni por los TEDAX, y que sirvió para detener a Jamal Zougam, supuesto "lider", junto con "El Chino" de la operación terrorista. Además de un coche Skoda Fabia donde se halló ADN de otro de los magrebíes imputados, un coche hallado tres meses después del atentado y dos meses después de la muerte de los presuntos terroristas en Leganés.
e) Las grabaciones de los terroristas durante los atentados, sus comunicaciones, fueron ocultadas. Cosa que no ocurrió con los atentados islamistas del 7J en Londres, donde aparecieron al instante.
f) En 2012 fue hallado, en el taller de examen y desguace de los trenes explosionados el 11M de 2004, uno de los trenes, que no fue destruido y que fue ocultado según instrucción del juez Juan del Olmo. El fiscal general del Estado, Eduardo Torres Dulce, ya con gobierno del PP, decidió archivar la causa.
Algunos incluso afirman a que no fueron ni islamistas ni etarras los autores intelectuales ni materiales de la masacre, apuntando incluso a servicios secretos tanto internos como externos. Lo que está claro es que hoy día las víctimas de aquella masacre están totalmente olvidadas por las administraciones públicas y por la ciudadanía en general, más preocupada por la crisis que por repensar lo que aquella fatídica jornada aconteció. Los atentados del 11M se unen así a una serie de acontecimientos en la historia de España que, desde la transición, se han ido sucediendo sin quedar en absoluto claras las circunstancias en que se produjeron, y que en cierto sentido se interconectan entre sí. Estos acontecimientos son:
a) Atentado terrorista que asesino al presidente del gobierno franquista Luis Carrero Blanco el 20 de diciembre de 1973. La autoría oficial señala a ETA, pero son numerosos los que afirman que, tras este atentado, se encuentra la CIA y Henry Kissinger, que querían deshacerse de Carrero por sus posiciones antinorteamericanas. Además, la embajada de Estados Unidos estaba muy cerca de donde ocurrió el magnicidio.
b) Los sucesos de 9 de mayo de 1976 durante la procesión carlista a Montejurra, Navarra, tradicional en el movimiento carlista. Ahí se enfrentaron dos facciones, la tradicionalista franquista liderada por Sixto de Borbón y la "progresista" liderada por Carlos Hugo, su hermano. En el bando de Sixto había infiltrados varios mercenarios argentinos e italianos neofascistas que abrieron fuego contra el bando de Carlos Hugo, matando a dos personas. Sixto de Borbón fue expulsado de España sin juicio, y fueron absueltos por la amnistía de 1977 todos los detenidos por aquellos disparos. Aquello supuso el fin oficial del carlismo.
c) El envenenamiento masivo supuestamente por aceite de colza en 1981 en España. Murieron 1100 personas y fueron intoxicadas otras 25.000, que todavía sufren las consecuencias junto con sus descendientes. En 1989 los imputados por la distribución del aceite fueron absueltos y el caso se cerró. Se dice que la causa se finiquitó porque España, en 1981, estaba en trámites de entrar en la Unión Europea, y tenía ya que deberse a los que manejaban desde el principio esta Unión: Alemania. Supuestamente, no fue la colza, sino un producto químico de la poderosa empresa alemana Bayer, la que mató a toda esa gente. España ya comenzó en aquellos años, y de la mano de Felipe González, su sumisión criminal al Cuarto Reich.
d) El golpe de Estado del 23F de 1981. Nunca se supo quién era el "elefante blanco", el militar que, supuestamente, iba a tomar el poder político en España mientras el teniente de la guardia civil Antonio María Tejero tomaba el Congreso de los Diputados. Algunos apuntan a que fue el mismo rey de España quien lo organizó todo, para después él mismo desmontarlo y no perder su legitimidad.
e) El secuestro, tortura, violación y asesinato de tres chicas adolescentes en la ciudad valenciana de Alcácer en noviembre 1992, mes en que desaparecieron. Los dos presuntos autores, Miguel Ricard y Antonio Anglés, sufrieron suerte dispar. Ricard fue juzgado y detenido, mostrando en el juicio parecer un retrasado mental. Anglés continúa hoy todavía en paradero desconocido, afirmando algunos incluso que ha muerto. Se dice todavía que las tres niñas fueron secuestradas por grupos organizados para realizar snuff movies (películas reales donde se graban torturas y asesinatos para consumo privado), cosa que no se ha demostrado. Uno de los padres de las niñas se enfangó en tratar de encontrar la verdad de lo sucedido, implicando incluso a posibles tramas de sectas satánicas, donde militarían sujetos con poder político en Valencia. Aquello acabó en nada tras un programa de televisión dirigido por Jesús Hermida llamado "La obsesión de Alcácer", donde se pidió pasar página y dejar a las chicas "descansar en paz". El crimen, realmente, está sin resolver.
f) Por supuesto, el 11M.
Todos estos hechos siguen sin ser desvelados del todo, y suponen una sucesión oscura de atrocidades que acompañan la historia reciente de España en su tránsito de la dictadura franquista a la democracia borbónica, madre e hija político-históricas. En todo caso, yo hago mías las palabras al respecto de Julio Anguita sobre esta cuestión:
"La verdad del 11M llegará a saberse, aunque con retraso". Y lo mismo vale para el resto de casos.